Una charla con Jeff Hawkins nos llevo a un fascinante viaje a través del funcionamiento de la neocorteza, la parte del cerebro que despierta nuestra curiosidad y asombro. Quiero explorar las ideas clave presentadas por Hawkins y cómo arrojan luz sobre la forma en que aprendemos y modelamos nuestro mundo.
Hawkins nos desafía a repensar la neocorteza como algo más que una simple receptora de información sensorial. La propuesta de que esta estructura cerebral también es una constructora activa de un modelo tridimensional del mundo es un concepto revolucionario. ¿Cómo logra esto la neocorteza? A través de la exploración y el movimiento. Nuestro cerebro, según Hawkins, es como un incansable aventurero que se sumerge en el mundo que lo rodea, tomando datos sensoriales y construyendo un modelo en constante evolución.
En este proceso, los marcos de referencia emergen como protagonistas. Son como coordenadas en el mapa mental del cerebro, permitiéndole situar la información en un contexto espacial y temporal. Imagina que estás caminando por un bosque; los marcos de referencia son los árboles y las piedras que te ayudan a orientarte y a recordar el camino que has recorrido. Son esenciales para mejorar nuestra comprensión y memoria.
Lo que más me impresiona de la charla de Hawkins es cómo estos procesos aparentemente simples tienen un impacto profundo en nuestra inteligencia y aprendizaje continuo. La capacidad de predecir y adaptarse a nuevas situaciones es un componente clave de la inteligencia, y parece que nuestra neocorteza está diseñada para hacer precisamente eso.
En resumen, la charla de Jeff Hawkins nos muestra que nuestra neocorteza es mucho más que una máquina de procesar información; es un constructor activo de un modelo tridimensional del mundo que nos rodea. La exploración, el movimiento y los marcos de referencia son herramientas vitales en este proceso. Esta perspectiva nos brinda una comprensión más profunda de cómo aprendemos y cómo funciona nuestra inteligencia. Nos invita a contemplar nuestro cerebro con asombro y a seguir explorando los misterios de la mente humana.