Imagina por un momento que todo lo que haces, cada decisión que tomas, ya estaba escrito en las estrellas, o mejor dicho, en las sinapsis de tu cerebro antes incluso de que te dieras cuenta. Suena un poco a ciencia ficción, ¿verdad? Bueno, eso es exactamente lo que Sam Harris, ese cerebro con patas que se pasea entre la neurociencia y la filosofía, nos plantea en su libro “Free Will”.
Según Harris, la idea de que somos capitanes de nuestro propio destino es más un cuento de hadas que una realidad. Nos habla del determinismo causal, una idea que suena tan técnica que casi necesitas un título para entenderla. Pero, básicamente, viene a decir que todo lo que hacemos está preprogramado por una serie de eventos y leyes naturales que nos preceden. Vamos, que si creías que elegiste comer pizza anoche por pura voluntad, Harris te diría que había un montón de pequeñas decisiones y circunstancias previas que te empujaron a tomar esa “decisión”.
Y si eso no fuera suficiente para hacerte cuestionar tu existencia, Harris mete la neurociencia en el ring. Menciona estudios donde, a través de resonancias magnéticas, se ha podido predecir qué decisión tomaría una persona antes de que ella misma fuera consciente de su “elección”. Es como si tu cerebro tuviera su propio plan y a ti solo te dejara creer que estás al mando.
Entonces, ¿qué pasa con la física y el libre albedrío? Harris también tiene algo que decir al respecto. Si el universo sigue un guion determinista, estamos en un camino predeterminado. Pero, si por otro lado, el universo es una lotería cuántica de eventos sin causa, eso tampoco deja espacio para el libre albedrío. Es una situación de “estás condenado si lo haces, y condenado si no lo haces”.
Pero aquí viene el twist: Harris no quiere que nos hundamos en un mar de desesperanza. Todo lo contrario. Al entender que nuestras decisiones pueden estar fuera de nuestro control, podemos ser más empáticos y comprensivos con los demás. Esto podría llevarnos a una sociedad donde la justicia se enfoque más en rehabilitar que en castigar, ya que entenderíamos que, a veces, las personas hacen cosas malas no porque quieran, sino porque hay una maraña de circunstancias detrás.
En resumen, “Free Will” no es solo un libro que te hace cuestionar si realmente elegiste leerlo o si tu cerebro ya había tomado la decisión por ti. Es una invitación a mirar la vida, la moralidad y la justicia desde una perspectiva completamente nueva. Así que, ¿fue realmente tu elección interesarte por este tema, o fue el universo conspirando para que le dieras una oportunidad a Harris? Piénsalo.
Referencia
Harris, Sam. “Free Will”. 2012. Para quienes estén interesados en explorar estos conceptos en profundidad, pueden encontrar el libro aquí en Amazon.es.