Tomar Notas: ¿Es Realmente la Mejor Estrategia de Estudio?”

Cuando nos sentamos en clase o frente a un libro, a menudo asumimos que tomar notas es un paso esencial para el aprendizaje. A todos nos han dicho que es una manera efectiva de recordar lo que estudiamos, pero ¿alguna vez te has preguntado si realmente es así? La verdad es que la ciencia detrás de la toma de notas es mucho más compleja de lo que parece a primera vista. Hoy, quiero hablarte de lo que realmente sabemos sobre la utilidad de tomar notas y por qué quizás no sea la panacea que pensabas.

Primero, hablemos de la base de todo esto: la evidencia científica. No hay duda de que se han realizado cientos, si no miles, de estudios sobre cómo tomamos notas y su impacto en el aprendizaje. Sin embargo, la mayoría de estos estudios simplemente asumen que las notas son útiles y se centran en aspectos muy específicos de la toma de notas, como la cantidad o la calidad de las mismas. Por ejemplo, un estudio encontró que aquellos que tomaban notas y las repasaban antes del examen tenían mejores resultados que los que no lo hacían. Sin embargo, otro grupo que solo leía las notas de un compañero sin haber asistido a clase obtuvo resultados similares, lo que nos deja con la pregunta: ¿realmente es la toma de notas lo que ayuda o simplemente leerlas?

La mayoría de los estudios que mencionan la importancia de las notas tienden a crear lo que se llama una “falsa dicotomía”. Esto significa que presentan dos opciones como si fueran las únicas, cuando en realidad hay más posibilidades. Por ejemplo, un estudio puede comparar tomar notas con solo prestar atención en clase y concluir que es mejor tomar notas. Pero, ¿qué pasa con otras técnicas de estudio? Tal vez, ni siquiera deberíamos enfocarnos tanto en las notas y deberíamos explorar opciones como la autoevaluación, que ha demostrado ser incluso más efectiva en algunos casos.

Otro punto importante es el tiempo. Muchos estudios evalúan la efectividad de tomar notas a corto plazo, justo después de una clase o una lectura. Pero, ¿qué pasa cuando necesitamos recordar la información semanas después? Un estudio mostró que aquellos que se centraban en la cantidad de notas tomadas tenían mejores resultados inmediatos, pero su rendimiento caía con el tiempo. En cambio, quienes organizaban mejor sus notas mantenían un rendimiento más constante. Entonces, ¿deberíamos llenar nuestras páginas con notas o más bien ser selectivos y organizados?

Finalmente, lo que realmente importa es cómo integramos la toma de notas en nuestro proceso de estudio general. No se trata solo de escribir todo lo que escuchamos o leemos, sino de usar las notas como parte de una estrategia más amplia. Por ejemplo, tomar notas después de haber reflexionado sobre el material puede funcionar como una forma de autoevaluación, lo que maximiza la retención.

En conclusión, no es que tomar notas sea inútil, pero depende mucho de cómo y cuándo las tomes y qué otras estrategias de estudio utilices. Si solo dependes de las notas, podrías estar perdiendo la oportunidad de utilizar técnicas más efectivas. Así que la próxima vez que te sientes a estudiar, piensa en cómo puedes combinar diferentes métodos para obtener el máximo beneficio.

Referencias Clave para Profundizar en el Tema:1. Cognitive Psychology - Ulric Neisser

Neisser es conocido como el “padre de la psicología cognitiva” y su libro es fundamental para entender cómo procesamos y retenemos la información.
2. “How We Learn” – Benedict Carey
Este libro ofrece una visión fresca y accesible sobre las diversas técnicas de estudio y cómo se comparan entre sí.
3. “Make It Stick: The Science of Successful Learning” – Peter C. Brown, Henry L. Roediger III, Mark A. McDaniel
Este libro es una referencia esencial sobre la ciencia detrás del aprendizaje efectivo, incluyendo técnicas como la toma de notas.
4. “A Mind for Numbers: How to Excel at Math and Science (Even If You Flunked Algebra)” – Barbara Oakley
Oakley ofrece estrategias prácticas para mejorar el aprendizaje en ciencias, incluyendo la toma de notas y la autoevaluación.
5. “Learning How to Learn: How to Succeed in School Without Spending All Your Time Studying” – Barbara Oakley & Terrence Sejnowski
Este libro explora varias técnicas de estudio basadas en la investigación científica, incluyendo la toma de notas.

Cada uno de estos libros ofrece una perspectiva diferente y valiosa sobre cómo estudiamos y aprendemos, proporcionando un marco para reflexionar sobre la toma de notas y otras estrategias de estudio.