Averigüe por qué es posible que NO se necesite ir al médico tan a menudo como cree.

La vida adulta puede ser difícil, y la lista de responsabilidades puede parecer interminable. Además de limpiar la casa, comprar la comida, alimentar al gato, pagar las facturas y reparar el coche, también debes acordarte de hacer visitas regulares al médico. Y no solo los exámenes y los tratamientos posteriores son caros, sino que también toman mucho de su valioso tiempo.

Pero, ¿y si realmente no tuvieras que ver a un médico de forma regular? ¿Qué pasa si todas estas visitas no te benefician realmente? Se nos anima a prestar tanta atención a nuestra salud, que se termina generando toda una obsesión. Sabemos que hay toda una industria detrás de estas ideas tan obsesivas. En algún momento del camino, hemos terminado pensando que envejecer es indeseable y que, sin importar el costo, deberíamos resistir los estragos del tiempo. Algo que tarde o temprano nos llegará a todo el mundo.

Eso es un estado de miedo que nos ha generado esta industria, y que muchas personas todavía dejan de hacer todas las cosas adecuadas porque no quieren admitir que están envejeciendo. El envejecimiento es una etapa orgánica y natural de la vida,que algo con lo que un día tendremos que lidiar.

Sabemos que aquellos que no tienen suficientes recursos económicos, son los que menos visitan los médicos de forma regular. Sin embargo, aquellos con mejores condiciones económicas, acaban terminando obsesionados con la posibilidad de que un ataque al corazón, un cáncer o una enfermedad degenerativa les impidan disfrutar de una vida plena. Me parece que cuando llegamos a tener más años, debemos mantener una perspectiva más sana e inteligente. No podemos obsesionarnos con el miedo.

Preocuparse por posibles problemas de salud que no se tienen ahora mismo, no está ayudando a nadie, más que a esta industria en auge.

Quizás deberíamos centrarnos en todo lo bueno que viene con la vejez, para que podamos vivir una vida más agradable en general.

Los beneficios de envejecer incluyen la experiencia, la sabiduría, la perspectiva, la calma, la gratitud, la compasión, la aceptación y la perspectiva. También se puede disfrutar de más tiempo para hacer las cosas que se aman, para estar con la familia y los amigos, para apreciar la belleza de la naturaleza, para cultivar nuevas y más profundas relaciones y para desarrollar una mayor comprensión de uno mismo y de los demás.

A medida que se envejece, se tiene la oportunidad de brillar cada vez más como la persona única y maravillosa que se es.